domingo, 29 de marzo de 2009

Me gustó, me gustó.

Estuvo muuuuy buena la ópera rock del Sr. Fors, claro que también los participantes.
Llegamos a las 8:05, mostramos los boletos (lástima que nos tocó en la sección D), ya que no nos pusimos de acuerdo en si asistir o no; subimos a la barra a comprar unas cervezas que estaban bien frías, ssssssssssssss, qué rico, nos sentamos unos minutos en lo que daban las 8:30, mientras disfrutábamos de una plática amena. Entramos para buscar nuestros lugares ya era la segunda llamada, estaba emocionada y el Metropolitan llenooooooooo, ¡ Guau !, tenía que ser.
Uno de los acomodadores nos llevó hasta los asientos.
Y en 5 minutos anunciaron la tercera llamada. Estabamos demasiado lejos para alcanzar a ver bien las expresiones de los participantes, pero el chiste fue estar ahí, disfrutando de las voces tan buenas que tienen estos exponentes.
Ahhhhhhhh, pero no faltaron los que llegaron taaaaaaaarde y no alcanzábamos a ver muy bien que digamos, eso siiii, cae en la punta del...
Pasó una hora y se hizo el intermedio, sólo diez minutos y tuvimos que bajar corriendo al baño, cuando volvimos a los lugares ya había empezado de nuevo y chin (qué pena me dio) tuvimos que pedir permiso para volver a pasar y levantar a la gente, pero no podía aguantarme y no ir al baño. Ayy, esas cervezas quisieron salir pronto, jejejejejejeejejejje.
Terminó la obra y todo mundo de pie aplaudiendo, ¡Guau!, bien valió la pena ir, al parecer van a hacer una gira por diferentes estados de la República y que van a volverse a presentar aca.
Quedamos en irlos a ver nuevamente pero ahora si en las primeras filas.
Yeahhhhhhh!!!
Nos esperamos un rato, en lo que salía la mayoría del público, después cuando ibamos saliendo se podían ver pequeños grupitos rodeando a personajes, nos quedamos baboseando para ver a quién mirábamos, jejejejejejejejejeje.
Estaban dos de Café Tacuba, Eli Guerra, Jaime Garza, Lino Nava, y la verdad no recuerdo quienes más andaban por ahí, pero pues la gente les pedía autógrafos y se tomaban fotos con ellos.
Ah, porque estaban sirviendo cocteles a los invitados especiales y amigos de los participantes de la obra en la barra de arriba del Teatro. Y nosotros seguíamos baboseando namás por no tener prisa.
Empezaron a pedir que desocuparan las escaleras, para que obviamente nadie puediera molestar a la gente VIP, jajajajajajajajajjaja.
Decidimos emprender el regreso a casa, eso sí, con una sonrisa de oreja a oreja por haber compartido una vez más una buena experiencia.
Gracias por haberme invitado.


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Y hoy estoy un poco triste porque no voy a poder ir a ver a Bunbury, otro año más sin verlo, siempre me pasa lo mismo, pero el siguiente año ahora si espero poder ir a alguna de sus presentaciones.



1 comentario:

Pinche Vieja dijo...

Bunburyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyy